Pervivencia de los viejos rituales en la actualidad
Para comprobar esto, sólo tenemos que recorrer los diversos lugares de nuestra geografía para darnos cuenta presencialmente de que son muchos los ritos ancestrales que hoy perviven, siendo "La Fiesta", y sobre todo la del "Carnaval" la que incluso los reúne en un mismo contexto.
Haciendo un breve recorrido por algunos de los diversos lugares en que hemos encontrado reminiscencias de viejos rituales, tenemos dentro de las fiestas del Carnaval:
"Los Peliqueiros" de Castro (Orense)
En esta pequeña aldea se dice que aparecieron por primera vez estos personajes que todavía perviven durante los días de carnaval. Al igual que en Laza, los peliqueiros llevan enormes caretas hechas de cartón piedra y van armados con pequeños látigos con los que golpean a los que no se apartan de su camino. Luego hay una gran merienda en la que participa todo el mundo.
"Los Peliqueiros" de Laza (Orense)
Vemos a éstos, ahora, como llevando vistosas y enormes máscaras, los peliqueiros, persiguen a la gente armados con látigos. Durante tres días recorren todos juntos el pueblo haciendo sonar enormes cencerros que llevan a la espalda. El lunes por la mañana hay lucha de "farrapos" (sacos llenos de barro) y por la tarde lanzamiento de fariña (harina) y hormigas; también sale la morena (hombre con cabeza de vaca). Todo termina el martes, el "día grande", con la lectura del "testamento del burro".
"Las Pantallas" Xinzo de Limia (Orense)
En esta localidad destaca el desfile del Martes de Carnaval en que salen "las pantallas" quienes, vestidas de blanco, con capas rojas, cascabeles a la cintura y originales máscaras, recorren las calles dando enormes saltos, mientras agitan en las manos vejigas de animales.
"El Boteiro" de Viana do Bolo (Orense)
Al ser centro de la comarca, el domingo, vienen a Viana gentes de todas las aldeas cercanas haciendo sonar los más variados instrumentos de percusión (pucheros, sartenes, cucharas). En el gran desfile destacan los boteiros quienes con grandes máscaras, adornadas con papel de colores, y sirviéndose de largos palos a modo de pértiga, van dando grandes saltos.